El día de ayer, se inauguró
la exposición titulada “Inca and cherry blossom
weave the world of Pachamama.-Mother Earth-” de la fotógrafa japonesa Yuriko Nakao en el auditorio
Machu Picchu de nuestra Embajada en Japón.
En el evento, el Embajador
del Perú destacó que esta muestra se haya originado a partir del viaje que
realizó la fotógrafa a Cusco donde visitó varias comunidades. Asimismo, recalcó
que es un proyecto artístico particular que traza lazos entre el Perú y Japón.
Por su parte, la autora indicó
que esta muestra propone recobrar los lazos de los seres humanos con la
naturaleza y busca crear un espacio de encuentro de las concepciones sobre la
naturaleza en el Perú y Japón a través de dos íconos representativos: los incas
y la flor del cerezo. Del primero, resalta la consideración inca de respeto
hacia la naturaleza que era considerada divinidad muy presente en la vida
diaria de sus habitantes. De la segunda, rescata la consideración histórica de
la flor de cerezo como árbol sagrado en Japón.