Con la presencia de todo el personal de la Cancillería, la Ministra de Relaciones Exteriores, Cayetana Aljovín, presidió hoy, en el patio principal del Palacio de Torre Tagle, una ceremonia en conmemoración del "Día Internacional de la Mujer".
La Canciller inició sus palabras saludando a las mujeres que laboran en el Ministerio de Relaciones Exteriores y las felicitó por su valioso trabajo y dedicación, tanto en nuestro país como en nuestras embajadas y consulados.
En su discurso, la Ministra Aljovín destacó la necesidad de combatir la desigualdad como forma de discriminación. “Requiere un valor cotidiano luchar cada día en todo ámbito por la igualdad de género y la igualdad de oportunidades”, indicó. En ese sentido, destacó la publicación de la ley que prohíbe la discriminación remunerativa por género, ya que significa un claro avance para revertir la actual situación de desigualdad de ingresos. “El principio que hay que defender, y creo que es una defensa que tenemos que hacer no solamente las mujeres sino también los hombres, es que a igual trabajo igual remuneración. Así como ayer se logró conseguir la igualdad para el voto, hoy esa debe ser nuestra meta, nuestro propósito: la igualdad remunerativa”, recalcó.
Finalmente, la Canciller recordó que “la igualdad de género es un derecho humano fundamental”. Por ello, “es una obligación de todas las personas, indistintamente del género, enfrentarnos a la injusticia y la discriminación contra las mujeres. Es una exigencia legal y moral. El sentido más mínimo de decencia nos obliga a rechazar el acoso, el hostigamiento y toda expresión de maltrato y ofensa y abuso hacia las mujeres”.
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